
Ayer domingo por la noche tres jóvenes quedaban atrapados en la base del Puente Romano en Ourense debido al aumento del caudal del río Miño.
Uno de ellos logró salir por sus propios medios, mientras que los otros dos tuvieron que ser rescatados por los bomberos con la colaboración de la Policía Local y Nacional.
Los jóvenes estaban en buen estado de salud, pero no podían alcanzar la orilla debido al nivel del agua. Los servicios de emergencia respondieron al llamado del 112 Galicia y se descartó la necesidad de atención médica.