Durante el mes de mayo la Seguridad Social ha tenido que pagar 38.508 pensiones contributivas menos que en el mes de abril. La causa según el Misterio de Seguridad Social radica en la alta mortandad que el COVID-19 ha tenido entre los receptores de dichas prestaciones.
El otro motivo, atiende al cierre de las oficinas de la Seguridad Social durante el estado de alarma, lo que ha propiciado que no se pudieran tramitar las nuevas altas.
Esta rebaja del mes de mayo sigue la tendencia iniciada en el mes de marzo, algo que no se producía desde 2005.
Lo peor de estos datos es que hayan tenido que venir dados por el fallecimiento de tantas personas, por lo tanto no es un dato que debe llevar al optimismo ni a la satisfacción.
