Según el Concello de Ourense, los comerciantes de la Praza de Abastos nº 1 de Ourense no presentaron a tiempo el proyecto exigido por el Concello para trasladar sus puestos —ubicados provisionalmente en la Alameda— al edificio recientemente rehabilitado. Según fuentes municipales, el expediente se resolverá en los próximos días, y todo apunta a un desalojo inminente de los puestos de la Alameda y a la rescisión de la concesión de la gestión del mercado.
“O prazo rematou e os praceiros non presentaron o proxecto. Isto ratifica as nosas sospeitas de que o único que buscan é unha dilación no tempo: non facer nada e seguir na Alameda”, declaró esta mañana el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome. El regidor explicó que los servicios jurídicos del Concello continuarán con la tramitación del expediente, lo que podría derivar en un desalojo en un plazo de entre 30 y 60 días.
Pérez Jácome adelantó que el siguiente paso será “a toma de decisión baseada en argumentos legais. Todo indica que se incumpriu o convenio e que iso dá lugar a unha resolución do contrato e ao desafiuzamento da Alameda”, añadió. En caso de confirmarse, el Concello sacará a concurso la gestión del nuevo mercado para que el edificio rehabilitado pueda, por fin, abrir sus puertas.
El alcalde no escondió su malestar con la actitud de los comerciantes, que —según dijo— “pretenden estar toda a vida na Alameda”. También desveló que “a última oferta que nos fixo a Xunta de Galicia, a través do conselleiro de comercio José González Vázquez, é que a Xunta pagaría a maior parte dos custos da construción dos stands, pero a cambio de estender o tempo do contrato dos praceiros, ‘pola cara’”. “Algo de dubidosa legalidade”, opinó Jácome, quien lanzó una crítica directa: “se esa manobra que propón a Xunta de Galicia, (estender a concesión pola cara) a fixese o alcalde cunha concesionaria, o PP xa estaría denunciándoo no xulgado”.
El regidor también recordó que “a escusa, sen cuantificar, é que se os praceiros tivesen que pagar algo, tiveran máis tempo de contrato como compensación. Algo ademais improcedente xa que xa tiveron 7 anos de prórroga máis dende o 2018, que lles deu tamén o goberno do PP. É unha manobra para ter unha nova concesión sen licitar», advirtió el alcalde.
Antecedentes: una prórroga agotada y una decisión judicial
El conflicto viene de lejos. En abril, la Xunta de Goberno Local concedió a los comerciantes tres meses de plazo para presentar un proyecto de adecuación del interior del edificio, requisito indispensable para poder trasladarse desde la Alameda. Dicho proyecto debía contar con la aprobación del Concello, que daba además un plazo máximo de seis meses para ejecutar las obras una vez aprobado.
Sin embargo, la asociación de comerciantes recurrió el acuerdo y pidió su suspensión cautelar, una solicitud que fue rechazada por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Ourense, que falló a favor del Concello en septiembre.
