Actualmente, los turistas buscan salir de los recorridos tradicionales y romper con la rutina. Los casinos, salas de juego o bingo ofrecen no sólo la oportunidad de pasar un buen momento y divertirse, sino también de entretenerse un entorno diferente y acogedor.
Esto ha llevado a que las ciudades que reciben gran cantidad de turistas se hayan adaptado y que incorporen nuevas actividades recreativas para llamar su atención y contemplar las nuevas necesidades.
Cuando se relacionan las grandes ciudades de Mónaco, Las Vegas y Macao directamente con los casinos o centros de juego, se está dejando de lado la apreciación de que también son reconocidos aquellos complejos turísticos que se han construido alrededor de este mundo de luces, hoteles y espectáculos. No sólo los casinos pretenden que uno apueste a más, sino que también que los visitantes valoren y puedan gozar de estos lugares, que aúnan a turistas de todas partes del mundo, con el fin de apostar a la diversión.
No todo es diversión
Es innegable el reconocimiento que las actividades que se desarrollan en torno a juegos de azar y lugares de apuestas contribuyen a la activación de la economía del lugar, que otorga empleo a cientos de personas y abren las puertas a un desfile de turistas en la zona. Es por ello que los gobiernos del mundo han ido paulatinamente quitando las restricciones en contra de esta actividad, reconociendo que es favorable para la sociedad.
Casino para ti y tus amigos
Hoy en día, a estos centros de entretenimiento y distracción, se puede asistir con los amigos, ya que están perfectamente adaptados a los diferentes gustos de los turistas: nos podemos encontrar desde el tragaperras, apuestas en la ruleta y muchos más clásicos de los casinos, hasta salas de shows y eventos, con música en vivo, lo cual no queda nadie fuera de la diversión. Estos nuevos escenarios, en donde los visitantes concurren y están en contacto con otras personas, los lleva a tener en cuenta un detalle más a la hora de prepararse: su presencia, sus atuendos se vuelven un foco de atención en estos lugares.
¿Qué me pongo para asistir al casino?
Eso no significa que todos deben asistir a los casinos y salas de apuestas de traje o de manera formal. Aquí dejaran ver aquellos que ya tienen su estilo propio, y que incluso cualquier prenda le queda adecuada para la ocasión. Por otro lado, se considera que hay una forma correcta de vestirse, ya que eso denota cierto bienestar, equilibrio, y un clásico “estar a la moda”. Aquí surge una necesidad e incertidumbre de saber si se está bien vestido para la situación, si es suficiente o inadecuado. Por ello, a continuación se describen algunos tips de vestimenta para concurrir confiados y poder relajarnos.
Asistir a un casino nos hace pensar que debemos estar muy bien vestidos, incluso, por mucho tiempo era una barrera el querer ingresar vestido de manera informal, ya que existe cierto protocolo. El contexto del lugar nos denota cierta formalidad: mozos, camareras, el personal del casino en general mantiene una línea, sus uniformes son adecuados al lujo que quieren transmitir.
En el hombre, el traje con corbata y chaqueta hoy ya nos son obligatorios, pero no deja de ser un estándar y un estilo tradicional, que sobre todo de noche debe estar presente debido a la posibilidad de un evento especial. Como decíamos anteriormente, existe un protocolo, y si un turista asiste con camisas de verano, pantalones rotos y sandalias, tiene asegurado un lugar fuera del casino.
El atuendo masculino adecuado y que se recomienda es el frac, la chaqueta y la corbata o esmoquin. En el caso de las damas, un lindo vestido largo o algún traje de noche llamarán la atención y será reconocido con las miradas.
Existe una versión no tan formal y que no pierde el estilo para tener en cuenta: en hombres puede ser un traje pero sin corbata y en las mujeres un traje corto con chaqueta. De esta manera no se pierde el glamour y se tiene cierta presencia.
Uno de las mayores comodidades a la hora de apastar es hacerlo en el casino online, se puede jugar desde cualquier lugar, sin estar atentos al detalle de nuestra vestimenta.
Hay una última posibilidad de asistir con un estilo más propio, no tan de gala, pero no así que eso signifique lucir mal. La vestimenta masculina basada en una camisa de manga larga con jean y chaqueta y, en el caso de las mujeres, alguna falda con una blusa y una chaqueta, es una manera de hacerse presente con un look juvenil-deportivo en un contexto de divertirse con amigos, por ejemplo.
Por último, no se debe olvidar que la vestimenta al momento de asistir a estos lugares va a estar más ligada con el evento que acontece, allí tendremos la posibilidad de elegir el atuendo adecuado eventualmente.